Preguntas tontas de niños piripis.

Tras un agotador y precioso día en el zoo, en el que he sentido unas ganas inagotables de llenar mi casa de Papagayos azules, leones marinos vergonzosos,osos que saludan y demás bichejos (adorables todos a rabiar) hablando por teléfono con una amiga recuerdo como Doña Anacardo y su hermano el rubito mantenían una discusión sobre si los flamencos blancos estaban desteñidos o sin pintar y me mofo de la pija que se escandalizaba del culo adorable del "Papión Cinocéfalo" mientras lucía orgullosa una celulitis de Olé en el suyo propio.

Y mientras me acuesto en la cama continuo pensando,a pesar de la desaprobación del mundo  que en la bañera me cabe perfectamente un delfín , y que es una inversión a largo plazo ya que se comería el pescado que mi madre intenta hacerme engullir (sin éxito) desde hace ya 17 años.